Apple se encuentra en el ojo de la tormenta, ya que una coalición de inversionistas de la ciudad de Nueva York le pidieron demostrar que respeta los derechos humanos de sus trabajadores. Las quejas de los inversionistas llegaron después de que autoridades federales y trabajadores acusaran a la empresa de la manzanita de violar sus derechos laborales; básicamente por no permitirles formar un sindicato. Apple negó todas las acusaciones, y además aceptó contratar a una empresa externa para que investigue si hubo o no interferencia en la libertad de asociación y derechos de negociación colectiva de los trabajadores estadounidenses. La coalición de inversionistas controla casi $7,000 millones de dólares en acciones de la compañía; no es mucho si consideramos que la capitalización de mercado de la compañía supera los $2 billones de dólares, pero es suficiente para exigir un cambio.
Vía: The New York Times.
