Al momento de realizar el análisis sobre una empresa, podremos llegar a conclusiones sobre la decisión de compra o venta de una acción determinada. Cuando partimos de lo particular a lo general, se dice que hicimos un análisis “bottoms up”.
Ahora bien, debemos entender que las empresas no son entes aislados, un buen análisis debe contemplar las interacciones de la empresa en un entorno competitivo, dentro de una industria o sector, y a su vez dentro de un marco macro e incluso global.
Por ejemplo, si asumimos que la empresa ABC en un sector crecerá dos veces más rápido que la economía por los próximos 5 años, y su único competidor XYZ lo hará a un ritmo similar, estaríamos asumiendo que el peso de dicha industria dentro del PIB sería el doble en unos cuantos años. No decimos que sea algo imposible, pero nuestros supuestos deben guardar consistencia dentro de un contexto, y el no considerarlo nos podría traer resultados desproporcionados, o que reflejen de forma miope nuestra visión general.
Anteriormente hemos hecho mención sobre qué son los sectores, la clasificación GICS o Global Industry Classification Standard, y su relación con el Ciclo Económico.
En esta ocasión, veremos la manera de incluir esta perspectiva al momento de realizar un análisis fundamental.
¿Cómo se comportan diferentes sectores en distintas etapas del ciclo económico? ¿Cuáles son más susceptibles a presiones inflacionarias? ¿Cuáles son más defensivos ante escenarios adversos?
Este son el tipo de preguntas que son útiles para llevar a cabo un análisis fundamental completo. Imagina que encontraste una empresa con factores muy favorables, pero se encuentra en un sector con grandes presiones a nivel macro. Por ejemplo, una empresa en el giro de entretenimiento, o consumo discrecional, en un entorno económico deprimido. O una empresa de bienes raíces, pero con operaciones en una región donde se está presentando un ciclo de alza en tasas.
Es importante que puedas identificar los “tailwinds”, o factores macro que juegan a favor, así como los “headwinds”, o entornos contrarios, que afectan a las industrias de tu interés. Estos pueden ser transitorios, o parte del ciclo económico, así como estructurales que indiquen cambios de paradigmas en gustos de consumidores.
Entendemos que todas las variables macroeconómicas tendrán implicaciones en los resultados de las empresas en diferentes industrias, pero existen unas que afectan en mayor medida a ciertos sectores, y es por eso por lo que vale la pena analizar a las empresas y sus dinámicas grupales en conjunto.
En una estrategia de inversión de largo plazo, es recomendable incorporar una diversificación sectorial, con industrias que se complementen. Hay sectores que se ven presionados por alza en precios de ciertos productos, sin embargo, hay otros que son los principales beneficiados. Este tipo de condiciones se dan con bastante frecuencia, y bien vale estar posicionado para poder salir adelante de forma balanceada.