En las finanzas, así como en el deporte, la disciplina se manifiesta en una estrategia ante las diversas condiciones que se puedan presentar en los mercados financieros, para poder potencializar los recursos que te permitan alcanzar tus objetivos. Es así que presentamos tres puntos a considerar para que al invertir, la disciplina juegue a tu favor.
Siempre considera llegar al final
Al igual que en un IronMan, el objetivo es cruzar la meta, y el atleta se prepara mentalmente para eso. En tu inversión es lo mismo: siempre debes considerar, respetar y mantener al final del horizonte los recursos invertidos para una meta preestablecida, evitando faltar a tu compromiso con el objetivo del dinero, retirando los recursos antes de tiempo, por razones no justificables o dudas.
En este sentido, existe una estadística que muestra que salir en momentos cuando los mercados aparentan ser más inestables puede llegar a resultados poco rentables, a diferencia de la permanencia, que en esos mismos periodos ha logrado mejores resultados bajo un periodo posterior de recuperación. Por lo tanto, busca darle su tiempo a las inversiones para que maduren en tu beneficio.
Es sano realizar depósitos frecuentes
Más allá de la evolución que pueda experimentar un mercado, la disciplina de realizar depósitos recurrentes favorecerá a disminuir la volatilidad de los recursos durante la inversión, y gracias a la reinversión podrás hacer crecer más los recursos en términos relativos a sin aportación.
Es de ahí que hacer este tipo de aportaciones va a fortalecer tu inversión, y está en ti hacerlo un hábito positivo para tus finanzas personales. Hemos realizado varios ejercicios numéricos al respecto, y los resultados al invertir muestran este beneficio en el tiempo, y más en productos como los fondos de inversión, que muestran gran flexibilidad para ir haciendo estas contribuciones en cualquier momento y con las mejores condiciones.
Una constante de la disciplina en el deporte, es siempre establecer tu propio registro y tratar de superarte, es decir, establecer tus propias marcas y métricas. En las inversiones también es parte de la disciplina el establecer métricas que para ti sean las más adecuadas, para ver cómo se ha desempeñado tu inversión en el tiempo. De igual forma, puedes considerar algunos referentes de mercado o “benchmarks”, que son considerados para orientarte si tus recursos van en el camino adecuado.