Unidos jamás serán vencidos
La decisión de subir la tasa de interés en 0.25%, para dejarla en 4.75%, se tomó de manera unánime. Eso supimos ayer con la publicación de las minutas de la última reunión de la FED, que también mostraron que no todos los oficiales estaban muy de acuerdo. Algunos miembros del Comité Federal de Mercado Abierto, que decide el nivel de la tasa, presionaron para incrementar la tasa en 50 puntos base. Esta minoría defendía la necesidad de mantener un enfoque agresivo para volver más rápido al tan ansiado 2% objetivo de la inflación.
Los datos duros
El Índice de Precios al Consumidor llegó al 6.4% anual en enero; mientras que el Índice de Precios al Productor, que mide los precios de las materias primas, llegó al 6%. Ambos indicadores se situaron por encima de las expectativas de los analistas, pero no son los únicos que se toman en cuenta. También el mercado laboral se encuentra ajustado –con muchas contrataciones pues–, lo que puede obligar a los empleadores a subir los salarios, que ergo, termina por impulsar la inflación.
¿A dónde vamos a parar?
Como podrás ver, el 6.4% que alcanzó la inflación estadounidense en enero se encuentra bastante lejos del objetivo de la Reserva Federal, por lo que es prácticamente seguro que continuarán incrementando la tasa de interés. Sin embargo, pudimos ver en sus minutas que la barra para tomar un enfoque agresivo sigue estando bastante alta. Las reacciones del mercado confirmaron que las cosas no cambiaron mucho, ya que tanto acciones como bonos solo registraron pérdidas muy pequeñas en la jornada.
Vía: Financial Times y CNBC.