El asesor financiero vive un proceso de reinvención, donde busca la eficiencia y accesibilidad, acompañada de valores como la confianza, transparencia y empatía hacia los inversionistas.
De acuerdo con el estudio ‘Asesores financieros: el impulso que México necesita’ de GBM Advisors, comisionado a la consultora EY-Parthenon, la confianza, transparencia y empatía toman distintas formas ante los inversionistas.
El 47% de los entrevistados por EY-Parthenon dijo que la razón principal para trabajar con un asesor financiero tiene que ver con el desempeño o retornos superiores; 44%, con la asesoría en planeación o gestión fiscal y, 37%, con la atención, servicio y conveniencia.
Incluso, 53% de los asesores mexicanos, que fueron encuestados, comentaron que los inversionistas valoran la planificación financiera integral y que sus asesores proyecten confianza y empatía hacia ellos. Atributos que no son tangibles, a través de las nuevas tecnologías.
El asesor financiero dejó de ser esa persona que solo compra y vende acciones. Ahora, propone una planeación para lograr las metas personales de sus inversionistas. Los orienta, construye la confianza, es empático y ayuda a construir presupuestos, planes de ahorro, fiscales y de inversiones, todos hechos a la medida.
¿Por qué es tan importante la personalización del servicio, basado en la confianza, transparencia y empatía? Porque el 54% de los mexicanos, que no invierte, considera que la información disponible es difícil de entender.
Las necesidades de los mexicanos son un reflejo de las tendencias en los modelos de asesoría financiera, a nivel mundial. Una de ellas es la asesoría integral, donde el asesor se coloca en el centro de la vida financiera del cliente y le ayuda a diseñar estrategias integrales basadas en objetivos.
En la encuesta de EY-Parthenon, realizada a inversionistas en México, el 37% dijo que el aspecto más valorado de tener un asesor es el servicio personalizado.
Otra tendencia se encuentra en el desarrollo de plataformas tecnológicas, que han permitido la interacción, de manera más efectiva, entre asesores e inversionistas, así como asignación de portafolios modelo según el perfil de riesgo.
El 47% de los asesores mexicanos indicó que la simplicidad operativa y las herramientas tecnológicas para el desarrollo de sus funciones, destacan entre los factores más importantes a la hora de seleccionar un lugar para trabajar.
Los nuevos modelos de atención son otra gran tendencia, donde destaca la asesoría híbrida que permite al inversionista interactuar con una plataforma —y hasta administrar una parte de sus recursos— con el respaldo, guía y consejos de un asesor.
En el mercado mexicano, el 47% de los clientes encuestados comentó que prefiere un modelo híbrido para seleccionar los productos en los que invierte.
La asesoría financiera ha evolucionado notablemente y lo seguirá haciendo para ofrecer un servicio más integral. Esto conforme se continúe democratizando y permeando en segmentos de menores activos, gracias a los avances tecnológicos y modelos innovadores de bajo costo.
Para descargar la versión completa del estudio: ‘Asesores financieros: el impulso que México necesita’ y ponerte en contacto con GBM Advisors. Haz clic aquí