Actualmente existen diversas herramientas financieras entre las cuales escoger. En esta ocasión encontrarás información de utilidad sobre los fondos indexados: qué son, sus tipos y cómo invertir en ellos. Así que si buscas un instrumento de inversión de gestión pasiva, diversificada y con comisiones bajas, este artículo te será de mucha utilidad. ¡Comencemos!
¿Qué son los fondos indexados?
Los fondos indexados o fondos índice son fondos de inversión en los que se intenta replicar el comportamiento de un índice bursátil, recogiendo las alzas o bajas que estén presentes en el índice de referencia. Algunos de esos índices modelo son el Ibex35, Standard & Poor ‘s 500, Euro Stoxx 50 y Nasdaq.
Se destacan por sus bajos costos administrativos, punto que atrae a los inversionistas porque permite que el capital se invierta mayormente en la compra de activos.
Además tienen un nivel de complejidad bajo, por lo que son usualmente elegidos por quienes desean iniciarse en el mundo de las inversiones pero no tienen mucha experiencia. Sin embargo, desde GBM+ se recomienda que te asesores bien antes de colocar capital en cualquier producto financiero.
Particularidades de los fondos indexados
Este tipo de fondo de inversión tiene las siguientes particularidades:
- Versatilidad. Al no centrarse en un solo tipo de activo ofrecen variedad al inversor, lo cual permite diversificar la inversión entre distintas empresas o diferentes sectores.
- Permiten invertir directamente en el mercado de valores.
- Permiten comprar todos los valores que contiene el índice de referencia que intentan replicar.
- Ser de gestión pasiva. Los gestores no tienen que realizar operaciones para superar al mercado, sino que eligen un índice determinado y replican su comportamiento.
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Gestión de los fondos de inversión: indexados vs tradicionales
Cuando se evalúan las diferencias entre los fondos índice y los fondos de inversión tradicionales lo que más destaca es la forma de gestionarlos. En el caso de los indexados, invertir en ellos implica comisiones muy bajas ya que no requieren mayor implicación por parte del gestor que los administra.
Están son las dos formas de gestión de los fondos de inversión:
Fondos de gestión pasiva
Los fondos indexados se basan en la gestión pasiva para su administración. Esto significa, como se explicó antes, que demandan menos actividad del asesor financiero: el inversionista solo debe hacer una inversión inicial en activos financieros, y luego puede conservarlos en su cartera de inversión a largo plazo.
Fondos de gestión activa
Este tipo de fondos, considerados como los tradicionales, son los que en lugar de replicar un índice determinado buscan superar su índice de referencia con el objetivo de obtener mayor rentabilidad en el mercado donde cotizan. Generalmente se realizan muchas operaciones de compra-venta para adelantarse a los movimientos del mercado de valores, razón por la cual invertir fondos de gestión activa implica una comisión de administración más alta.
Tipos de fondos indexados
Los fondos que trabajan con este tipo de inversión de gestión pasiva pueden agruparse según su política de seguimiento, o por la modalidad de réplica que hacen del índice. Continúa leyendo para conocer las tres categorías en las que se clasifican:
De réplica física
En este caso, el gestor compra en su totalidad los componentes del índice bursátil. Por ejemplo, si el índice de referencia es el IBEX 35, se adquieren las 35 acciones que lo componen. Usualmente este tipo de fondo tiene un bajo margen de tracking error, es decir que la diferencia de rentabilidad entre el índice bursátil tomado como referencia y el fondo que lo replica es baja o cercana a cero.
Este tipo de réplica está respaldada por activos como bonos y acciones.
Si decides invertir en este tipo de fondo, toma en consideración que si el índice a replicar tiene un gran compendio de empresas o si hace seguimiento a activos menos líquidos (como los bonos corporativos) esto puede significar el aumento de los costes de gestión al requerir un mayor número de operaciones.
De réplica sintética
Los fondos que siguen este método utilizan derivados financieros (es decir, activos cuyo valor depende de otro activo) y son respaldados a través de la firma de un contrato o total return swap con un banco que se compromete a pagar la rentabilidad del índice de referencia a cambio de una comisión de gestión adicional equivalente al coste del swap.
Gestionar a través de un tercero implica que la comisión cobrada disminuirá la rentabilidad obtenida.
Aunque el tracking error será bajo ya que el riesgo de desviación lo corre el banco, es importante resaltar que al usar esa técnica se añade un factor extra de riesgo a la inversión: el éxito de esta dependerá de la estabilidad del banco. Por ejemplo, el quiebre del mismo implicaría que no pueda responder al pago prometido.
De réplica por muestreo
En esta técnica se selecciona un grupo de empresas representativas del índice de referencia. Por ejemplo, si se quiere trabajar con el índice Standard & Poor ‘s 500, se pueden seleccionar las 400 empresas con mayor relevancia de éste.
En este caso no se invierte en la misma proporción en todas las empresas del índice, esto con el objetivo de invertir en menos valores y reducir el coste de gestión. Usualmente los índices que replican bonos están formados por un número grande de estos activos de renta fija, por lo que este método es usado por los fondos que replican bonos para facilitar la inversión en éstos.
Es importante que el gestor tenga la habilidad y capacidades técnicas necesarias para seleccionar las empresas más representativas, lo cual será fundamental para disminuir el tracking error que implica no invertir en todas las empresas del índice.
Ya sabes que existen diversas metodologías. Ahora puedes seleccionar la que se ajuste más a tus objetivos y a tu perfil de riesgo, no sin antes tomar en cuenta las ventajas y desventajas que tiene invertir en este tipo de fondos. ¡Sigue para conocerlas!
Ventajas y desventajas de los fondos indexados
Ahora que sabes que los fondos de inversión indexados están compuestos por activos tomados como referencia de los índices bursátiles, es momento de que conozcas sus pros y contras. Así tendrás claro si este instrumento de inversión es para ti.
Ventajas
- Funcionan a largo plazo: cuanto mayor sea el plazo de inversión, mayor podría ser el rendimiento obtenido.
- Manejan bajas comisiones de gestión: al implicar una gestión pasiva el gestor interviene menos, por lo que minimizan los costes de transacción; es decir, hay comisiones más baratas.
- Obtienen mayor rentabilidad: gracias a la gestión pasiva podrías obtener un mayor retorno de inversión, ya que implica comisiones bajas, reajustes automáticos y te permite diversificar.
- Consumen menos tiempo: estos fondos de gestión pasiva no intentan influir en el comportamiento del mercado. Por esta razón el inversor no necesita analizar la bolsa detenidamente, ya que comprará la opción completa. Esto permite un seguimiento sencillo que consiste en revisar el comportamiento general del índice para entender la tendencia del fondo.
- Ideales para inversionistas en etapa inicial: son fáciles de comprender, no es necesario un amplio conocimiento en herramientas financieras. Este producto de inversión podría permitirte comprender la evolución del mercado sin mayor problema.
- Facilitan la diversificación: cada índice tiene numerosos activos, así que tu dinero no está en una sola acción.
- Ventajas fiscales: permiten el traspaso de las participaciones de un fondo a otro sin pagar plusvalías. Esto quiere decir que podrás mover tu capital de un mercado a otro más conveniente sin un costo extra.
Desventajas
- Poca diversificación geográfica: aunque este fondo de inversión te permite tener presencia en un mercado amplio, existe el riesgo de que se pierdan buenas oportunidades localizadas en otros mercados no incluidos en esos índices. Puedes contrarrestar este efecto armando una cartera de inversión con diferentes fondos indexados que te permitan tener una exposición diversificada.
- Baja oferta: anteriormente el acceso a estos fondos índice solo podía obtenerse a través de gestores automatizados o roboadvisors. Por ello, aunque paulatinamente se ha permitido el acercamiento al público general, cuentan con menos oferta que los fondos de inversión tradicionales o de gestión activa.
- Comportamiento: los beneficios y rentabilidad del fondo dependerán de los movimientos del mercado. Es decir, como el objetivo no es superar sino igualar al mercado, si el índice réplica cae el fondo también tendrá este comportamiento.
- Consecuencias de la gestión pasiva: al seguir el comportamiento ya predeterminado del mercado, el gestor no hace cambios en la composición del fondo; esto impide que se realicen cambios para mejorar el desempeño.
Aspectos a considerar antes de elegir un fondo indexado
La oferta en el mercado de los estos fondos de gestión pasiva es cada vez más grande, por lo que debes prestar atención a estos aspectos fundamentales para elegir el que resulte mejor para ti.
Tu objetivo financiero y de liquidez
Antes de escoger un fondo indexado es necesario evaluar cuál estrategia de inversión será mejor para ti según las ventajas de los fondos, la liquidez que deseas y tus objetivos financieros futuros. Los fondos de inversión son ideales para planes a largo plazo; si deseas estructurar un plan de retiro, podrían ser la mejor opción.
Comisiones
La gestión pasiva característica de este tipo de fondos no permite predecir el comportamiento del mercado ni influir en él; por esto la evolución de la inversión pudiera ser distinta a la que inicialmente se planeó.
Es recomendable tomar en consideración el TER (Total Expense Ratio) pues al ser el ratio de los gastos totales de una inversión, toma en cuenta los costos de comisiones de gestión y depositario (la institución o persona que cuida de los bienes bajo su custodia) y otros gastos de explotación, permitiendo así visualizar los gastos totales de un fondo de inversión para obtener una mejor vista de la rentabilidad del producto.
Diversidad geográfica
Antes de decidirte por un fondo de inversión es recomendable definir qué sería más conveniente: dividir tu inversión en un fondo que trabaje con empresas de un solo país, por ejemplo Estados Unidos, con una sola región como Norteamérica o que incluya una selección global de compañías.
Liquidez del fondo
La liquidez del fondo está relacionada con el volumen de activos que tiene. Esto te ayudará a identificar qué nivel de aceptación y confianza tienen los inversores sobre ese gestor: cuanta más liquidez tenga, mayor tamaño y capacidad de diversificación tendrá.
Exención tributaria
Es importante que tengas en consideración que este tipo de fondos de inversión pasiva, como se mencionó más arriba, proporciona una ventaja extra en temas fiscales, ya que los inversores no deben pagar impuestos al momento de vender o mover sus fondos (el dinero recibido debe dirigirse a la inversión en otro fondo).
Tracking error
El tracking error mide la diferencia entre el fondo de referencia y el comportamiento del fondo indexado. Por lo tanto, entre menor sea el valor del tracking error, la similitud entre el fondo réplica y el original será mayor. Puedes saber si un índice tiene buen score, o puntuación, entre más se acerque a 0.
Gestora de confianza
Es fundamental que la firma gestora que escojas sea de confianza y que tenga todas las capacidades necesarias para llevar tu inversión de la mejor manera. En GMB+ Wealth Management puedes encontrar las herramientas necesarias para comenzar a invertir, de la mano de un equipo de expertos con la mejor tecnología.
Cómo invertir en fondos indexados
Una vez que tengas un intermediario o compañía gestora de confianza, estarás listo para hacer tu inversión. Para ello asegúrate de seguir estos pasos:
Elegir el índice bursátil
Puedes escoger el índice que más se ajuste a ti. Las inversiones pueden realizarse en un fondo internacional o en una combinación de fondos regionales.
Entre los índices más comunes están el MSCI (compuesto por empresas de 23 países de distintos continentes); el S&P 500 (empresas de Estados Unidos); MSCI Europe (400 empresas europeas). Ten en cuenta que cuanto más restringido sea el índice mayor será el riesgo.
Disminuir el riesgo geográfico con diversificación
Como se expresó con anterioridad, concentrar la inversión en un solo país es contraproducente. Por tanto, es recomendable una cartera amplia con un compendio de elementos que permitan diversificar la inversión.
Automatizar tus inversiones
Es recomendable que utilices todas las herramientas tecnológicas que puedan permitirte invertir de la manera más eficiente posible. Al automatizar tus inversiones evitas dedicarles demasiado tiempo y estarás más protegido de los errores.
También impide que gastes sin necesidad el dinero destinado a invertir, ya que la automatización se encarga de administrarlo en la cuenta bancaria. Por ejemplo, en lugar de emplear el dinero en bienes que no son de primera necesidad como ropa o zapatos, este es enviado de manera automática hacia la inversión, evitando así que desvíes tus ingresos.
Inversión y compra constantes
Es aconsejable invertir de manera regular, independientemente de si el precio está alto o bajo, esto para disminuir las posibilidades de comprar en un mal momento.
También es posible invertir a través de un robo advisor o gestor automatizado. Estas plataformas utilizan algoritmos para crear carteras de inversión, y luego de implementar un test son capaces de recomendar al usuario el tipo de inversión más conveniente. Este método permite realizar una inversión diversificada, ya que las carteras están compuestas por varios fondos indexados; pero tiene la desventaja de que no te ofrece la experiencia y el seguimiento de una gestión personalizada.
Es importante tener claro que los fondos índices no guardan relación con los Exchange-Traded Fund o ETFs, Aunque tanto los ETFs como los fondos indexados buscan replicar el comportamiento de un índice, los ETFs actúan como una acción que puede ser comprada o vendida en cualquier momento como un valor de renta variable. Si te interesan los ETFs, en este Ebook aprenderás mucho más.
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