Invierte con propósito 

En un país como el nuestro, en el que las oportunidades económicas cambian constantemente, pareciera imposible pensar que aún muchas personas no cuentan con un plan financiero sólido que les permita alcanzar sus objetivos y asegurar una estabilidad financiera a largo plazo. 

A pesar de que actualmente los instrumentos de inversión se encuentran al alcance de la mayoría, gracias al acceso que plataformas como GBM ofrece, la falta de una estrategia bien diseñada aún representa una limitante para el crecimiento financiero. Sin un plan definido, es fácil cometer errores como pensar que es posible predecir el mercado, e incluso, tomar decisiones impulsivas en momentos de volatilidad. Así, en un entorno tan cambiante, contar con una guía profesional más que un lujo es una necesidad. 

Con el objetivo de promover las inversiones y facilitar el camino para que la sociedad pueda alcanzar a través de ellas sus metas financieras, GBM ofrece la innovadora metodología "Invierte con propósito". Una estrategia basada en la creación de cinco portafolios diseñados para atender las diferentes necesidades y horizontes de inversión que existen.  

Estos portafolios buscan adaptarse a diferentes etapas de la vida financiera de los inversionistas, ofreciendo soluciones personalizadas que se alinean con sus metas y aspiraciones.  

En primer lugar, tenemos el portafolio denominado “Necesidades inmediatas”; diseñado para cubrir cualquier requerimiento de liquidez en el corto plazo, asegurando que el capital esté disponible cuando se necesite. El objetivo es cuidar el dinero y evitar riesgos innecesarios, invirtiendo en opciones seguras que den rendimientos estables. 

El siguiente portafolio es el de “Reserva”, que también está diseñado para garantizar liquidez, pero con una diferencia clave: es posible que no sea necesario usar estos fondos en el corto plazo o incluso nunca; es decir, está pensado como un “colchón financiero”. Es ese respaldo que da tranquilidad y ayuda a enfrentar imprevistos sin afectar la estabilidad económica. 

Como tercer portafolio se encuentra el de “Inversión balanceada”, que busca un balance entre estabilidad y crecimiento, replicando una mezcla diversificada de activos globales: acciones, bonos, bienes raíces y materias primas. Es ideal para metas de mediano plazo y para quienes tienen una tolerancia al riesgo moderada. 

En un cuarto lugar está el portafolio de “Acciones”. Este portafolio está diseñado para generar riqueza a lo largo del tiempo, invirtiendo exclusivamente en acciones globales. Es ideal para inversionistas con una alta tolerancia al riesgo, dispuestos a enfrentar volatilidad a cambio de mayores rendimientos potenciales. 

Finalmente, el quinto portafolio, “Objetivos específicos”, está hecho para metas con una fecha clara en el horizonte, como pagar la universidad de los hijos o comprar una casa. A diferencia de otros portafolios, aquí la estrategia se adapta conforme se acerca la fecha del objetivo, ajustando el nivel de riesgo y la selección de activos para que el dinero esté disponible justo cuando se necesite. 

En conclusión, “Invierte con Propósito” proporciona un camino claro y flexible. Es un enfoque diseñado para evolucionar junto con los inversionistas, adaptándose a sus necesidades en cada etapa de la vida y asegurando que su inversión siempre esté alineada con sus objetivos.