En la antigua Grecia, Atenea era la diosa de la sabiduría. De acuerdo con dicha mitología, ella nació de la frente del propio Zeus, ligando desde los inicios un origen divino a la inteligencia. Era la hija favorita de Zeus, y entre sus hazañas se encuentran vencer a Ares y Poseidón, apoyada en la estrategia que creaba con su conocimiento, superando la fuerza bruta de sus rivales.
Durante un tiempo también se pensó que la inteligencia, si bien no necesariamente tenía un origen espiritual, sí era uno de los rasgos que definían al ser humano. Era de uso exclusivo del hombre, y nos separaba de las demás especies que habitan este planeta. Fue la herramienta que permitió nuestra subsistencia, alcanzar la cima como especie y hacer nuestra vida más simple.
Pero, ¿qué es la inteligencia?
Algunos consideran que es la capacidad de entender, analizar, y elaborar información nueva a partir de datos. La Real Academia Española nos dice: es la habilidad que tienen las personas para resolver problemas. Podemos destacar dos elementos, generar conocimientos y aplicarlos de forma útil.
¿Por qué la especie humana ha logrado florecer? ¿Solo por la capacidad de identificar el binomio cuadrado perfecto? No, sino por la aplicación que le ha dado a ese conocimiento para resolver problemas y adaptarse, imaginar una nueva realidad y moverse hacia ella. Si lo analizamos, invertir es un acto inteligente en sí, imagina tu realidad y muévete hacia allá.
Howard Gardner propone que existen siete tipos de inteligencias, desde la lógica matemática y lingüística hasta la interpersonal e intrapersonal. Este enfoque de psicología educativa no deja de destacar el fin utilitario que nos da la inteligencia.
Hoy en día conocemos como inteligencia artificial a la capacidad de las maquinas de percibir su entorno y llevar a cabo alguna acción que aumente las posibilidades de lograr una meta. Dentro de las funciones principales que estas máquinas deben realizar o emular, están conocer, aprender y… resolver problemas.
Aprovechemos la oportunidad, las cosas inteligentes hacen que lo complejo de la vida sea simple.
Imagina que ahora tus estrategias de inversión también sean inteligentes.