Invertir como los ultra-ricos: oportunidad o riesgo calculado
Durante décadas, el mundo de las inversiones ha estado dividido entre dos polos: la prudencia del inversionista promedio y la audacia de los ultra-ricos. Sin embargo, gracias a la tecnología y al abaratamiento del crédito, esa frontera se ha ido borrando. Estrategias antes reservadas para grandes fortunas —como el uso del apalancamiento para ampliar la exposición a acciones— están al alcance de cualquier inversionista informado.
El artículo reciente de The Economist (“Investing like the ultra-rich is easier than ever”, 24 de septiembre de 2025) ilustra bien esta transformación. Lo que antes parecía exclusivo de fondos de cobertura y family offices ahora puede hacerse desde una computadora portátil. La pregunta es si esto representa una verdadera democratización o un riesgo innecesario.
La lógica detrás del “lifecycle investing”
Todo parte del trabajo de Ian Ayres y Barry Nalebuff, autores del libro Lifecycle Investing (2010). Su argumento, aunque provocador, es profundamente racional: los jóvenes deberían considerar tomar prestado para invertir en acciones, siempre que lo hagan de forma controlada y con una estrategia de largo plazo.
La idea se basa en el principio de “diversificación intertemporal”. En otras palabras, un joven de 30 años con ingresos estables tiene, aunque no lo vea en su cuenta bancaria: su capital humano, es decir, su capacidad futura de generar ingresos. Si se incorpora ese capital humano al patrimonio total, la exposición al riesgo financiero podría —al menos teóricamente— ser mayor
El análisis histórico de Ayres y Nalebuff muestra que, entre 1871 y 2009, un inversionista que aplicaria un apalancamiento moderado (por ejemplo, invertir 150 dólares por cada 100 propios) habría obtenido rendimientos ajustados por riesgo consistentemente más altos. No se trata de apostar más, sino de distribuir el riesgo de manera más eficiente a lo largo del tiempo.
El nuevo inversionista apalancado
The Economist presenta el caso de “Mr. Street”, un joven profesional del sector tecnológico que lleva esta filosofía a la práctica. Con ingresos de 200 mil dólares al año, invierte a través de Interactive Brokers con una relación préstamo-valor entre 50% y 65%, financiándose en distintas monedas (dólares, yenes y euros) a una tasa promedio de 3.5%. En otras palabras, por cada mil dólares propios, invierte hasta casi tres mil.
Su enfoque no busca especular, sino aumentar su exposición al mercado global de acciones bajo la convicción de que los rendimientos esperados a largo plazo de la renta variable superan el costo del crédito. Su fe se basa en una evidencia empírica sólida: a lo largo de más de un siglo, el equity premium —la diferencia entre el rendimiento de las acciones y los bonos— ha sido positivo y persistente.
Cuando la teoría se encuentra con la realidad
El apalancamiento, por supuesto, no es gratuito. Aumenta la sensibilidad del portafolio ante caídas del mercado. Durante la corrección reciente del 19% del S&P 500, el portafolio de Mr. Street cayó 42%. El episodio dejó una lección clara: incluso una estrategia bien diseñada puede generar ansiedad y presión psicológica cuando la volatilidad se amplifica.
Esto no significa que el enfoque sea imprudente. Significa que debe aplicarse con consciencia y disciplina. En contextos donde las tasas son razonables, el horizonte es largo y el inversionista tiene ingresos estables, el lifecycle investing puede ser una herramienta útil para construir patrimonio de manera más eficiente. Pero requiere educación financiera, planificación y la capacidad de resistir los impulsos emocionales.
Hacia una sofisticación accesible
Lo más interesante de esta tendencia no es el apalancamiento en sí, sino la democratización de la sofisticación. Plataformas como Interactive Brokers, la proliferación de ETFs globales y el acceso a información en tiempo real permiten que inversionistas minoristas diseñen estrategias antes impensables. La sofisticación ya no es privilegio de los grandes patrimonios, sino una opción para quien se prepara y comprende los riesgos.
En ese sentido, el reto no es limitar estas herramientas, sino aprender a usarlas con responsabilidad. Igual que en la economía, la libertad sin conocimiento puede derivar en desequilibrio.
Conclusión
Invertir como los ultra-ricos ya no es un sueño lejano. Pero hacerlo con éxito exige el mismo rigor que ellos aplican: diversificación global, costos bajos, gestión del riesgo y, sobre todo, visión de largo plazo. La propuesta de Ayres y Nalebuff no es un llamado a la imprudencia, sino una invitación a pensar de manera más integral sobre cómo distribuimos el riesgo a lo largo de nuestra vida.
En un entorno donde las tasas, la inflación y los mercados pueden cambiar con rapidez, adaptar la teoría a la realidad personal de cada inversionista se vuelve esencial. Con asesoría profesional y disciplina, el lifecycle investing puede ser no solo viable, sino una estrategia racional para maximizar el crecimiento patrimonial.
Al final, los inversionistas que mejor navegan los ciclos de mercado no son los que buscan ganarle a los ultra-ricos, sino los que construyen carteras diversificadas y bien asesoradas, diseñadas para resistir los altibajos inevitables de la economía global. La diversificación —entre activos, geografías y horizontes temporales— sigue siendo el único “free lunch” de las finanzas modernas, y la guía de un asesor profesional puede marcar la diferencia entre una estrategia teórica brillante y un éxito sostenible en la práctica.
En última instancia, la verdadera sofisticación no consiste en copiar a los ricos, sino en entender las reglas que los han hecho prosperar: paciencia, educación, diversificación y prudencia.
- The Economist. “Investing like the ultra-rich is easier than ever.” 24 de septiembre de 2025.
- Ayres, Ian & Nalebuff, Barry. Lifecycle Investing: A New, Safe, and Audacious Way to Improve the Performance of Your Retirement Portfolio. Basic Books, 2010.
- Fama, Eugene F., & French, Kenneth R. “The Equity Premium.” Journal of Finance, 2002.
- Merton, Robert C. “Lifetime Portfolio Selection under Uncertainty: The Continuous-Time Case.” Review of Economics and Statistics, 1969.
- Buffett, Warren. Berkshire Hathaway Shareholder Letters. Varios años.
[1] Friedman, Milton. Essays in Positive Economics. University of Chicago Press, 1953.