Hemos comentado que el mercado se mueve en tendencias: ascendentes, laterales o descendentes. Dicho esto, en todo momento el precio de un activo se encuentra dentro de una tendencia o terminando alguna.
Identificar el final, o cambio, de una tendencia es una habilidad que puede ser muy redituable en el trading. A través del estudio de formaciones, o patrones, podemos mejorar nuestro instinto para encontrar estos cambios de tendencia o reversals.
Para que estas estrategias sean más efectivas debe presentarse el rompimiento de un soporte o resistencia relevante. Estos rompimientos son señales que las fuerzas entre oferta y demanda se han invertido.
Doble techo y doble piso
Estas formaciones se suelen encontrar después de movimientos importantes en el mercado. Una vez que un movimiento alcista presenta pérdida en su magnitud, y retrocede de un máximo, tomará impulso para continuar, si en el segundo intento falla en superarlo, podemos empezar a cuestionarnos. Comúnmente se observa mayor volumen al alcanzar el primer techo. De igual forma, el rompimiento a la baja deberá mostrar un incremento en el volumen de operación.
Cabeza y hombros
Es una de las formaciones más utilizadas. Se caracteriza por un rally que pierde fuerza, seguido por un par de rallys de menor proporción. Es importante prestar atención al comportamiento del volumen en este patrón para poder garantizar su validez.
Por lo general un máximo debe alcanzarse con volumen creciente, si observamos un menor volumen al momento de la formación de la cabeza, estamos anticipando problemas. Después de un breve ajuste, se presenta un intento fallido por regresar a los máximos (segundo hombro), con menor volumen aún.
Al trazar una lÃnea entre los dos valles, llamada neckline, se define un soporte. Una vez que se perfore este soporte (con mayor volumen) se estimará como objetivo una distancia similar a la presente entre el máximo y el neckline, hacia abajo.
Triángulos
Existen tres tipos de triángulos: simétricos, ascendentes y descendentes. Todos son considerados patrones de continuación.
Los triángulos simétricos son zonas de descanso para patrones de largo plazo, se forman de dos lÃneas que convergen. La lÃnea inferior la definen dos mÃnimos crecientes, y la superior la describe dos máximos decrecientes. El punto donde cruzan estas definirá el rompimiento. En estos triángulos suele resolverse en favor de la tendencia de largo plazo, comúnmente acompañada de volumen creciente.
Los triángulos ascendentes tienen las mismas caracterÃsticas que los simétricos, solo que la lÃnea superior es descrita por dos máximos, formando una resistencia.
Por su parte los triángulos descendentes ven su lÃnea inferior formada por una lÃnea horizontal que define un soporte.
Al momento de realizar la compra de una acción, existen innumerables resultados posibles, pero direccionalmente solo un par, que esta suba, o que baje.
‘Lo importante es cuánto pierdes cuando pierdes’ – George Soros
Es importante ser disciplinado con nuestras estrategias, y una de las lecciones más importantes es asimilar las pérdidas y aceptar cuando el trade no salió como esperábamos.
Que una acción suba más de 12% no es algo que podamos controlar, pero que no aceptemos una pérdida mayor a un determinado porcentaje es algo que sà podemos hacer.
El Stop Loss es la máxima pérdida tolerada determinada antes de comprar una acción.
Por ejemplo, si compro acciones de Apple en $130 y defino un Stop Loss en $125, quiere decir que lo máximo que estaré dispuesto a perder en este trade es un 3.8%.
Ahora bien, estos niveles pueden ser definidos de distintas formas. Hay quienes utilizan un porcentaje predefinido, otras personas que determinan porcentajes con base en la volatilidad del activo. Otros operadores suelen definirlos con base en: soportes, promedios móviles u otros indicadores.
Hay quienes utilizan el stop loss como estrategia para asegurar ganancias, imagina que un trade ha resultado ganador y acumulas ya un porcentaje de plusvalÃa. Al incorporar un Stop Loss dinámico, o trailing stop, puedes fijar tu salida con base en un avance máximo. Es decir que las acciones se vendan, una vez que el precio ajuste determinado porcentaje después de haber hecho un máximo.
Supongamos que compraste acciones de Twitter a $40 con un Stop Loss en $36. Posteriormente la acción avanzó y alcanzó $55, a estos niveles probablemente tu máxima pérdida tolerada ya no se encuentre en $36 (que serÃa una caÃda de 35% a estos niveles). Por lo mismo, se puede ajustar el Stop Loss para reflejar tu nueva visión, probablemente a niveles de $49.50 o $50.
La idea central es que el Stop Loss haga sentido dentro de la estrategia, pero principalmente que se respete.
Una de las piezas centrales en el mundo de las inversiones, y el trading, es el correcto manejo del riesgo.
En el capÃtulo anterior abordamos qué es un stop loss, y su relevancia. Ya que hemos identificado nuestra tolerancia al riesgo en determinada operación, la pérdida máxima para nuestra cartera será producto de estos stop loss, y la ponderación de cada operación.
Sabemos que los estilos de inversión y trading pueden ser muy diversos, hay personas que les gusta tener alta concentración en su cartera, solo 2 o 3 nombres. Por otro lado, hay quienes gustan de incluir arriba de 20 diferentes acciones. La realidad es que el diligente manejo del riesgo deberá tener esto en cuenta.
Supongamos que vas a operar solo un nombre, y tu stop loss implica una minusvalÃa digamos de 8%. Por otro lado, la máxima pérdida deseada por cada trade para tu cartera es de 1%. ¿Con qué porcentaje de nuestra cartera podrÃamos participar para cumplir nuestro objetivo?
Si compramos 100% de nuestra cartera de ese nombre, nuestra pérdida esperada serÃa 8%. Si compramos 50% la pérdida esperada serÃa 4%, si compramos 25% la pérdida esperada serÃa 2%, y asà sucesivamente.
Entonces, para mantener un riesgo total de 1%, participarÃamos con un 12.5%. Otra manera de calcularlo serÃa:
Ponderación activo x = máxima pérdida objetivo por activo / máxima pérdida en activo x
= 1% / 8%
= 0.125 = 12.5%
Recordemos que a medida que participamos con más nombres, se busca que el riesgo total sea menor que la suma de sus partes, y si buscamos una diversificación eficiente, este objetivo se puede lograr.