Enseña a tus clientes a no seguir a los demás

La psicología y las finanzas tienen una relación estrecha. La incertidumbre financiera y sus efectos negativos pueden extenderse a otras áreas de la vida. De hecho, ‘los temas de dinero’ se encuentran entre las cinco principales preocupaciones de los mexicanos, quienes reconocen que este tipo de estrés impacta de forma importante en sus actividades cotidianas. 

Frente a ello, y para contrarrestar el impacto económico negativo, muchos optan por ahorrar y, un porcentaje menor (2%) invierte sus recursos para buscar rendimientos, sin embargo, en este viaje una parte de los inversionistas no tiene claridad sobre cómo o dónde poner su dinero.

En ocasiones, las personas toman decisiones influenciadas por familia, amigos o compañeros de trabajo, quienes cuentan con poco o nulo conocimiento sobre temas económicos.

En finanzas, existe el comportamiento de ‘manada’ o ‘rebaño’, que es uno de los sesgos conductuales más comunes. En él, un inversionista copia modas, no entiende el activo, compra caro, vende barato, trata de perseguir al mercado, expone a su portafolio a riesgos elevados y lo lleva a pérdidas profundas.

El rol del asesor financiero

Como asesor financiero, deberás aportar valores como la objetividad, confianza y liderazgo para impedir que tus inversionistas tomen decisiones impulsivas, poco razonadas y terminen por quitarles la calma.

¿Cuáles son tus herramientas para luchar contra las emociones?  

  • Confianza y empatía. La comunicación abierta y simple, así como el acercamiento con tus inversionistas les dará mayor confianza. Por ejemplo, compartir tus experiencias o casos en los que fuiste testigo del impacto que causó el seguir tendencias o burbujas, puede ayudar a reforzar la certidumbre entre tus clientes y darles mayor tranquilidad sobre tu experiencia. 
  • Educación. El conocimiento que tú puedas aportar y, sobre todo, la forma en cómo enseñes a tus clientes será un diferenciador para que, con tu guía y acompañamiento, tus clientes tomen decisiones más inteligentes y, como resultado, inviertan mejor su patrimonio.
  • Estrategias dirigidas a objetivos. La estrategia que plantees con tu inversionista debe estar alineada con sus objetivos, plazos y perfil de riesgo. De esta manera, con un mayor conocimiento, puedes recomendar que se mantengan las inversiones en plazos más convenientes.
  • Oferta amplia de productos de inversión. Mientras más opciones e ideas le ofrezcas, va a ser más probable que se dejen de lado las modas para invertir y enfocarse en ofertas más tangibles y, posiblemente, de menor riesgo.

En el ecosistema financiero, las emociones intervienen y pueden llevar a tener pérdidas económicas por tomar decisiones apresuradas o ir detrás de lo que hacen los demás. Tu papel para reducir este sesgo es crucial. Educa, comunícate y diversifica las soluciones para tu inversionista. 

En GBM Advisors, te ofrecemos a ti, asesor financiero, una plataforma para impulsar tu autonomía y para quienes les apasiona mejorar la vida de sus clientes a través de las inversiones.

Compartir

Suscríbete al newsletter