Asesor financiero, el tiempo es dinero
‘El tiempo es dinero’, así lo dicta una de las frases más empleadas en nuestros días. Incluso, para un asesor financiero, refleja su actividad diaria donde, si administra las horas de trabajo de la mejor manera, optimizará esfuerzo y podrá aumentar las ganancias.
Distintos estudios comprueban que los asesores financieros están desperdiciando tiempo y, por lo tanto, dinero. Por ejemplo, Advicefront dice que se desperdicia una de cada ocho horas en tareas innecesarias o mecánicas. Ésas que van desde rebalancear portafolios, comprar o vender acciones, dar de alta o de baja cuentas, preparar juntas, llamadas, videollamadas, planeación, estudios de mercado y un largo etcétera. Lo que se transformaría —un año laboral— en 11 días perdidos.
El escenario se complica si tomamos como referencia que cada día, en promedio, se destinan dos horas a tareas que no generan nuevos ingresos para el negocio. Bajo el supuesto de que los asesores trabajan ochos horas, estarían malgastando alrededor de 21 días en un año.
Al menos existen dos alternativas para hacer frente a esta situación: la implementación de la tecnología, con herramientas como robo advisors, y el uso de portafolios modelo.
El robo advisor permite automatizar estrategias de inversión, monitorear diferentes portafolios y reducir, casi por completo, errores operativos.
El uso de portafolios modelo también contribuye a ahorrar tiempo. En lugar de que el asesor financiero haga, de manera manual, la selección de activos para uno (o varios) de sus clientes puede utilizar alguno, diseñados por expertos en inversión, que minimicen riesgos y maximicen ganancias.
¿Qué pasa si un asesor financiero no decide reajustar sus tiempos? Tendrá problemas graves de largo plazo. Básicamente, por resolver temas inmediatos, se verá comprometido a desarrollar estrategias para llegar a nuevos clientes, quienes —muy probablemente— serán más jóvenes, con diferentes intereses de inversión, otras formas de comunicarse y, a la espera de soluciones hiperpersonalizadas.
En GBM entendemos que el tiempo es dinero. Por ello, no solo acercamos las herramientas tecnológicas que darán una ventaja competitiva a los asesores financieros, también damos acceso a conocimiento para entender qué buscan las nuevas generaciones de clientes.