Cuando tienes un proyecto (o varios) a lo largo tu vida, tarde o temprano necesitarás invertir.
Una forma de realizar esto es mediante un fondo de inversión, uno de los productos financieros más usados en el mundo. A continuación, presentamos las ventajas más importantes para invertir en ellos.
Regulación y transparencia
Los fondos de inversión tienen su propia normatividad: la “Ley de fondos de inversión”, son supervisados y regulados por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), y toda la información en torno a lo que invierten y cómo funcionan es pública.
Administración profesional
Son manejados por expertos certificados para su operación, siempre de acuerdo con estándares internacionales y mejores prácticas. Actualmente, en nuestro país existen registrados más de 560 fondos de inversión.
Acceso a los mercados
Puedes tener exposición a múltiples valores de los mercados financieros formales, tanto locales como internacionales, entre los que destacan las acciones e instrumentos de deuda. La estadística histórica ha mostrado un mejor desempeño de los fondos de inversión con respecto a los instrumentos de ahorro tradicional; pese a que los rendimientos del pasado no son garantía del rendimiento que podría experimentarse en el futuro, sí ilustran la consistencia del producto en el tiempo.
Diversificación
Por su composición, los fondos son diversificados, lo cual permite tomar ventaja de cada una de las características de los valores e instrumentos que los integran, así como disminuir los altibajos de los mercados financieros.
Su diversidad en la oferta de producto, permite ordenar el dinero de diferentes formas; por ejemplo, hay fondos de inversión con disponibilidad diaria o semanal, entre otras, sin necesidad de mantener la rigidez en la disponibilidad de los recursos en periodos amplios, como lo hacen los vehículos de ahorro tradicionales.
Ahora lo sabes: los fondos de inversión son hoy una opción real para el inversionista de largo plazo que busca potencializar sus recursos en el tiempo. ¡Conócelos!