La seguridad económica a largo plazo es una inquietud cada vez más común en nuestra sociedad, sobre todo, debido a la crisis global existente en torno a las pensiones que crece como una bomba de tiempo silenciosa. En este contexto, las inversiones se presentan como una opción esencial para garantizar un retiro seguro y estable.
Con el aumento en la esperanza de vida, que desde 1950 ha incrementado un año cada lustro, así como un sistema de seguridad social que no alcanza a cubrir las necesidades de una población que crece día a día, muchas personas corren el riesgo de agotar sus ahorros antes de necesitar hacer uso de ellos para vivir cómodamente en su vejez.
De acuerdo con datos del Foro Económico Mundial (FEM), la brecha que existe entre los ahorros y las necesidades de jubilación se inflará en 400 billones de dólares en tres décadas, cuatro veces el PIB mundial.
Los pronósticos son tan apremiantes, que el propio FEM y otros organismos como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) han recomendado a los gobiernos elevar la edad de jubilación, simplificar los ahorros e inversiones a través de la tecnología, e incrementar la educación financiera en los planes de estudio de las escuelas.
Con esta premisa y siguiendo el compromiso que tiene GBM por democratizar el acceso a las inversiones, hoy existe un amplio ecosistema de instrumentos financieros de inversión al alcance de todos en tan solo minutos a través de un click, haciendo de éste, el mejor momento para que la sociedad ponga a trabajar su dinero asegurando un futuro estable.
Actualmente, existen tantas opciones, que los inversionistas que buscan ahorrar para el futuro pueden hacerlo basándose en una estrategia personalizada y el acompañamiento adecuado de asesoría que, a partir de su perfil, los guíe de manera óptima para generar rendimientos sin necesidad de recurrir a inversiones riesgosas, sobre todo, al ser a largo plazo.
La clave fundamental para incrementar los rendimientos evitando riesgos inesperados está en la diversificación de la cartera de inversión, así como el aprovechamiento del interés compuesto, es decir, la acumulación de intereses sobre el capital inicial, así como sobre los intereses generados previamente, que puede lograr que el dinero que se ponga a trabajar hoy se convierta en un patrimonio significativo para el futuro.
Basándonos en lo anterior, ya no es suficiente contar con ahorros tradicionales, hoy es necesario aprovechar el potencial de las inversiones para construir un futuro seguro, empanzado de forma temprana, manteniendo una disciplina constante y buscando asesoría financiera para tomar decisiones informadas.
Asegurar el futuro hoy está en las manos de quien ha decidido tomar el control de sus finanzas y comenzar a crecer su dinero, para lo cual GBM es el aliado ideal.