¡Bye, bye!
General Motors decidió despedirse de Apple CarPlay y Android Autos en muchos de sus nuevos modelos eléctricos, apostando por un software propio para la pantalla multimedia. La estrategia de GM, similar a la de Tesla, representa un nuevo giro en la batalla entre empresas automotrices y tecnológicas por el control de la interfaz digital y los servicios en el vehículo, con miles de millones de dólares en ingresos futuros en juego.
¿Qué hay de nuevo?
GM afirmó que su software especifico proporcionará una experiencia más personalizada para sus conductores, con una interfaz táctil personalizada y funciones propias de la marca. Por ejemplo, el software podrá recopilar datos sobre la carga eléctrica y la presión de los neumáticos, e incluso añadir funciones de conducción asistida. Estas funciones no pueden ofrecerse si la persona está conectada a CarPlay y Android Auto y, según GM, podrían generar ingresos entre $20,000 millones y $25,000 millones de dólares al año hacia el 2030.
¿Es un buen plan?
A pesar de la decisión de GM, ejecutivos de otras empresas automotrices afirman no tener planes de eliminar CarPlay y Android Auto de sus vehículos. No obstante, coinciden en que la competencia entre las compañías tecnológicas y automotrices por la atención de los propietarios de automóviles se está volviendo intensa. Mercedes-Benz Group, por ejemplo, está enfocada en desarrollar e integrar software propio en las pantallas de sus vehículos en lugar de confiar en terceros para desarrollarlo.
Vía: The Wall Street Journal.