Además, la empresa cuenta con subsidiarias líderes en diferentes mercados como YouTube, Waze y Android. La empresa, que cotiza en la Bolsa de Nueva York (NYSE) bajo los tickers GOOG* y GOOGL*, se ha establecido como un referente en tecnología.
Alphabet, Inc. es una de nuestras Top Picks internacionales. Google mantiene su posición dominante en el mercado de búsqueda, procesando más de 3,500 millones de consultas diarias, lo que le garantiza ingresos estables y acceso a volúmenes masivos de datos para innovar. Su enfoque en IA es clave, con el 25% del código generado por inteligencia artificial, fortaleciendo su ventaja competitiva. Además, su negocio en la nube, siendo el tercer mayor proveedor global, impulsa su crecimiento y ofrece un gran potencial de expansión.
Desde su desarrollo en computación en la nube hasta su innovación en la inteligencia artificial, Google ha apostado por proyectos ambiciosos que han redefinido industrias enteras. Su último proyecto es, sin duda, uno de los más visionarios en su historia. Se trata de un plan que no sólo tiene la posibilidad de revolucionar la empresa, sino transformar por completo el mundo como lo conocemos, afectando desde el sistema financiero hasta la esperanza de vida de los humanos: la creación de un procesador cuántico.
En 2019, Alphabet anunció por primera vez sus esfuerzos para desarrollar un procesador cuántico, que en pocas palabras, es un superprocesador que multiplica la capacidad de los procesadores actuales. Claro que, para entonces, ya tenían varios años y millones de dólares invertidos en el proyecto Sycamore. El anuncio también representó una declaración de haber alcanzado la “supremacía cuántica”, colocando a la compañía en una posición privilegiada dentro del desarrollo tecnológico de la computación cuántica. Sin embargo, Google no fue la única empresa en involucrarse en este tipo de tecnología y esta carrera ha empezado a calentarse, siendo una de las más importantes de la historia reciente.
Pero, ¿por qué un procesador cuántico tiene la posibilidad de cambiar tantas cosas y qué está en juego para Google con este proyecto?
Hoy en GBM The Story… Analizamos el liderazgo tecnológico de Google y su proyecto más ambicioso: la computación cuántica.
¿Qué es la computación cuántica y realmente cuánto impacto puede tener?
La computación cuántica es una nueva forma de procesar información que funciona de manera diferente a las computadoras tradicionales. Mientras que una computadora clásica usa bits que pueden ser 0 o 1, las computadoras cuánticas utilizan qubits, que pueden estar en ambos estados al mismo tiempo gracias a un fenómeno llamado superposición. Esto significa que pueden realizar cálculos mucho más rápido que una computadora convencional, resolviendo en minutos problemas que actualmente tomarían miles de años.
El padre de la computación cuántica es el físico de la Universidad de Oxford, David Deutsch, quien en la década de los setentas intentaba poner a prueba la teoría de los universos paralelos.
El impacto de esta tecnología puede transformar industrias enteras.En la medicina, por ejemplo, las computadoras cuánticas podrían simular cómo interactúan ciertas moléculas, acelerando el descubrimiento de medicamentos para enfermedades como el cáncer o el Alzheimer. Además, permitirían personalizar tratamientos al analizar con precisión la genética de cada paciente, mejorando la efectividad de los fármacos.
En el ámbito financiero, los bancos podrían utilizarla para detectar fraudes en transacciones de manera inmediata, mejorando la seguridad de los clientes. También podrían optimizar los portafolios de inversión al analizar múltiples escenarios económicos simultáneamente, reduciendo riesgos y maximizando retornos.
En el sector de la logística, las computadoras cuánticas podrían calcular la mejor ruta para cientos de camiones en tiempo real, optimizando costos y tiempos de entrega. También podrían ayudar a las aerolíneas a gestionar los horarios de vuelos de manera más eficiente, reduciendo retrasos y maximizando el uso de aviones y tripulación.
Otro caso de uso revolucionario es el impacto en el desarrollo de nuevos materiales. Con ayuda de la computación cuántica, los científicos podrían diseñar estructuras atómicas completamente innovadoras, creando materiales ultraligeros y resistentes para la industria aeroespacial o baterías más eficientes para vehículos eléctricos. En el campo de la inteligencia artificial, la capacidad de procesamiento cuántico permitiría mejorar los algoritmos de aprendizaje profundo, haciendo que los modelos de IA sean mucho más precisos y rápidos, beneficiando sectores como la automatización, la robótica y la traducción de idiomas en tiempo real.
El impacto disruptivo de los procesadores cuánticos es tan significativo que ya se han invertido miles de millones de dólares en desarrollar dichos procesadores, y Google es una de las empresas de tecnología que más ha invertido en el desarrollo e investigación de esta tecnología emergente.
Gasto de investigación y desarrollo de empresas relacionadas a la computación cuántica

Con empresas como Google apostando fuerte por esta tecnología, la computación cuántica podría ser una de las revoluciones más trascendentales del siglo XXI, impactando todos los aspectos de la vida cotidiana, desde la salud y las finanzas hasta la manera en que viajamos y consumimos energía.
Evolucionando la computación cuántica con Willow
A pesar de su promesa, la computación cuántica enfrenta desafíos técnicos y económicos significativos. La estabilidad de los qubits sigue siendo un obstáculo crucial, ya que cualquier interferencia externa puede alterar sus estados y generar errores en los cálculos. Estos procesadores son tan sensibles que sólo hablar cerca del procesador puede hacer que las vibraciones sonoras alteren los procesos de cálculo. Además, el alto costo operativo de estos sistemas hace que sólo instituciones con recursos financieros considerables puedan acceder a ellos.
Actualmente, el costo operativo de una computadora cuántica es hasta 1,000 veces mayor que el de una computadora tradicional de alto rendimiento, lo que limita su acceso y adopción masiva.
Otro factor clave es la falta de aplicaciones inmediatas. Aunque existen pruebas de concepto, la mayoría de los problemas actuales aún pueden resolverse de manera eficiente con computación tradicional. Esta realidad ha llevado a que algunos expertos se cuestionen cuánto tiempo tomaría para que la computación cuántica tenga aplicaciones comerciales prácticas.
A pesar de los desafíos, el liderazgo de Alphabet en la computación cuántica no se detuvo con el proyecto Sycamore. Desde 2019 la empresa ha desarrollado aún más su capacidad cuántica y, en diciembre de 2024, revelaron su proyecto Willow, un chip que puede ser el primer paso en la transición a la adopción de los procesadores cuánticos. Según Google, Willow no sólo es tan potente que quintuplica la capacidad de su predecesor, sino que también ha reducido significativamente los errores en los cálculos.
Willow parece ser tan potente que ya ha causado polémica. Según algunos científicos, Willow ya tiene la capacidad de comprobar la teoría de universos paralelos, e incluso Google afirma que ya ha accedido a universos alternativos.
El Futuro de Google en la computación cuántica: ¿Qué está en Juego?
Para Google, la computación cuántica no es sólo un experimento de laboratorio, sino una apuesta estratégica de alto impacto. Si la empresa logra consolidarse como líder en este sector, podría dominar una industria emergente con aplicaciones en una gran cantidad de sectores.
El desarrollo de chips –como Willow– coloca a la compañía en una posición clave para comercializar la computación cuántica como un servicio en la nube, similar a lo que ha hecho con Google Cloud.
Uno de los aspectos más debatidos en los avances de la computación cuántica es su impacto en la seguridad digital, en particular en las criptomonedas. Bitcoin y otras blockchain dependen de sistemas criptográficos avanzados para proteger las transacciones y activos digitales. La computación cuántica podría, en teoría, romper estos sistemas al resolver problemas matemáticos extremadamente complejos en cuestión de minutos en lugar de miles de años. Esto podría comprometer la seguridad de las claves privadas, que protegen los fondos de los usuarios.
Sin embargo, esta amenaza no es inmediata. A pesar del enorme poder de procesamiento de Willow, aún se necesitarían millones de qubits para romper los algoritmos criptográficos actuales, lo que lo hace inviable a corto plazo. La industria del blockchain ya está investigando soluciones post-cuánticas para anticiparse a este escenario. Se asegura así de que, cuando los chips cuánticos alcancen la suficiente potencia para vulnerar los sistemas criptográficos en los que se basa, la seguridad digital también habrá evolucionado en paralelo para evitarlo.
Una industria preparándose para el despegue
El mercado de la computación cuántica está actualmente valuado en $850 millones de dólares, una modesta cifra dado que de momento no tiene una aplicación práctica real, pero la industria está proyectada a crecer de manera significativa en los próximos años.
Se estima que para 2040, este mercado podría alcanzar un valor de hasta $174,000 millones de dólares, con aplicaciones que van desde la simulación molecular hasta la optimización de procesos industriales y el análisis de datos a una escala sin precedentes.
QTUM es un ETF que invierte en 71 compañías relacionadas a la computación cuántica, en los últimos 6 meses ha crecido 44.3% y puedes invertir en él a través de tu cuenta de GBM.
Uno de los principales impulsores del mercado de computación cuántica viene del gasto público, que según especialistas corresponde a más del 60% del gasto total destinado a desarrollo de la computación cuántica. Esto indica que existe un fuerte interés gubernamental en impulsar estas tecnologías y hacerse de ventajas tecnológicas frente a sus competidores globales.
Gasto público en desarrollo de computación cuántica por país

Google enfrenta la competencia de gigantes como Amazon, IBM, Microsoft y startups especializadas en tecnología cuántica. Sin embargo, con Willow y su enfoque en la reducción de errores y la escalabilidad, la compañía podría posicionarse a la vanguardia de esta revolución.
El éxito en este campo no sólo fortalecería su modelo de negocio, sino que podría llegar a redefinir la industria tecnológica y la forma en que resolvemos los problemas más complejos del mundo moderno. Sin embargo, a medida que esta tecnología avanza, la industria de los activos digitales deberá adaptarse para garantizar que su seguridad permanezca intacta en la era cuántica. ¿Se adaptará la industria a la misma velocidad?