Intuitivamente, al analizar una empresa existen una serie de dudas que surgen de manera natural: ¿cuánto dinero tiene o debe? ¿Cuánto vende y cuánto gana? ¿cuánto dinero generó o pidió prestado?
Esta serie de cuestionamientos, y otros tantos, pueden ser resueltos gracias a los estados financieros.
Conocemos como estados financieros a diferentes informes que reflejan la realidad económica y financiera de una empresa, de forma estructurada.
El hecho de tener una estructura, facilita el entendimiento, relevancia, y sienta las bases para llevar a cabo comparaciones. Ya sea contra su propio desempeño histórico, así como contra sus competidores.
A continuación daremos un breve repaso de tres estados financieros relevantes para el análisis de una empresa: Balance General, Estado de Resultados y Flujo de Efectivo.