Por: GBM Media/cortesía EFE.
La falta de suministros causa nuevas dificultades a los fabricantes de automóviles, que han tenido que anunciar mayores reducciones en la producción.
El fabricante automovilístico Mercedes-Benz, que pertenece a Daimler, va a interrumpir estos días la producción en Alemania y Hungría por falta de semiconductores.
Daimler informó que Mercedes-Benz va a parar la producción en las fábricas alemanas de Bremen (norte) y Rastatt (suroeste) y en la húngara Kecskemét, así como en parte de Sindelfingen (suroeste de Alemania).
La falta de suministros causa nuevas dificultades
La marca de la estrella ya había interrumpido la producción en Bremen, donde trabajan más de 12,000 personas, y en parte de la fábrica de Sindelfinger, donde emplea a 25,000.
Mercedes-Benz emplea en Rastatt a unas 6,500 personas y en Kecskemét a 4,700 trabajadores.
En sentido similar se pronunciaron General Motors (GM), Ford y Honda, que advirtieron que reducirían aún más la producción de vehículos por problemas de suministro, tanto de chips como de otros componentes.
Las fallas de General Motors
GM, el mayor fabricante de automóviles de Estados Unidos, advirtió a los empleados de la planta de montaje de Orion, donde se fabrica el vehículo eléctrico Chevrolet Bolt EV, que la producción será suspendida durante dos semanas.
Esto obedece a problemas en el suministro de paquetes de baterías.
Los problemas están relacionados con la ampliación de la llamada a revisión que GM realizó el 20 de agosto para solucionar un defecto con las baterías del vehículo y que afecta potencialmente a todas las unidades producidas desde 2016.
Las baterías, que fueron producidas por LG en Corea del Sur, tienen dos defectos: un ánodo desgarrado y un separador doblado, que aumentan el riesgo de incendio de las baterías.
La semana pasada, GM dijo que está trabajando con LG para averiguar las causas de los defectos.
GM informó a los empleados de la planta de Orion que el paro durará del 30 de agosto hasta el 13 de septiembre. La planta de montaje tampoco está operando por la escasez de chips.
Freno a Honda y Ford
Mientras, Honda advirtió a sus concesionarios en Estados Unidos en una carta que en las próximas semanas podrá reducir las entregas de vehículos hasta un 40% con respecto a lo previsto inicialmente, por problemas con sus proveedores en Asia.
La carta señala que ‘algunos modelos resultarán más impactados que otros’, pero que las entregas de los modelos Pilot y Passport ‘se espera que permanezcan constantes’.
Ford también está teniendo problemas añadidos con el suministro de chips que lo obligarán a recortar de nuevo la producción de su vehículo de más ventas y el más rentable, la camioneta pickup F-150, así como los todocaminos SUV Ford Edge y Lincoln Nautilus.
La compañía confirmó que la planta de montaje de Oakville, Canadá, que produce Edge y Nautilus, suspenderá la producción y que lo mismo tendrá que hacer la planta de Kansas City, donde se monta la F-150.
Además, la compañía recortará dos de los tres turnos de trabajo de la planta de montaje de Dearborn, Estados Unidos), que también produce la camioneta F-150.
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Las llamadas a revisión obstaculizan a General Motors cumplir sus objetivos