Uno de los instrumentos de inversión más populares son las acciones. Al momento de comprar una acción un inversionista está adquiriendo un pedacito del capital de la empresa, y se vuelve socio de los demás accionistas.
Sí, cuando compras una acción de Amazon, te estas volviendo socio de Jeff Bezos.
¿Cómo ganas invirtiendo en acciones? Como accionista de una empresa pública adquieres derechos, por ejemplo, derecho a compartir las utilidades que genera la empresa. Muchas compañías suelen decretar dividendos provenientes de las ganancias que generan.
De ahí que cuando a las empresas les va bien, el accionista debiera seguir la misma suerte.
La otra fuente principal de ganancia para los accionistas es la apreciación del valor de las acciones, o ganancia de capital.
Los elementos que afectan el precio de las acciones en el mercado son vastos, y en ocasiones parecieran irracionales. La realidad es que el desempeño del negocio suele generar apetito por sus títulos.
Día a día las acciones de empresas públicas cambian de mano en un choque de oferta y demanda que determina su precio en cada sesión de mercado.
Unas de las bondades de estos instrumentos es la liquidez, es significativamente más fácil vender acciones de una empresa que cotiza en el mercado, que vender tu participación en una sociedad privada.
Hoy en día, en el mercado mexicano podemos adquirir acciones de empresas nacionales e internacionales, facilitando así la diversificación de nuestro patrimonio.