No son pocos los autores que han intentado desentrañar la receta secreta para volverse rico. Sin embargo, si alguien intenta vendérnosla como un camino infalible, lo único cierto es que se trata de un engaño.

Existen bastantes aproximaciones, desde distintas perspectivas, entre las cuales podemos encontrar recomendaciones de las cuales a continuación hacemos un compendio.

Ideas y acción

Por ejemplo, Alejandro Saracho, experto en finanzas y desarrollo empresarial, y autor del libro Mentalidad de Riqueza Extrema, considera que hay siete filtros mentales para allanar el camino hacia la libertad financiera.

El autor considera que hay que basarse en el ejemplo de personas que han tomado buenas decisiones financieras, y que dan muestra de ello. Tal es el caso de Bernard Arnault, Jeff Bezos, Elon Musk, Bill Gates y Larry Page.

Y una vez teniendo ideas claras y grandes, el paso obligado que sigue es la acción, pues Saracho es enfático al señalar que los pensamientos no valen si no se conectan con acciones que conduzcan a resultados tangibles.

Steve Siebold, un hombre que cobró fama al hacerse millonario por sí solo, coincide: ‘Hacerse rico comienza con la forma de pensar y lo que creemos que es hacer dinero’.

Hábitos fáciles (y también difíciles) de adoptar

Por su parte, Diego Ortiz, autor del libro Rica Mente, considera que la clave, además de la mentalidad, está en los hábitos.

Entre los hábitos que menciona están pasar de ahorrar a conseguir más ingresos –al menos tres fuentes—y dejar de usar estos en cuidar las apariencias. Ortiz es claro en decir que no sirve de nada ahorrar por sí mismo, si el dinero que estamos ahorrando no lo destinamos a algo productivo como invertir.

El autor maneja muchos de los conceptos con los que los inversionistas deben estar familiarizados: definir una estrategia de inversión, el horizonte de tiempo, conocer la tolerancia al riesgo y establecer metas claras. Destaca además la necesidad de tener y seguir un presupuesto y considerar en él la inversión a rajatabla.

Ortiz también menciona la idea de rodearse de personas que responden al ideal que queremos lograr: ‘la respuesta a la pregunta de cómo hacerse rico la consiguió la persona que ya lo logró’.

Otra de las cosas que destaca es la importancia de la capacitación y especialización. Más dinero llegará con más enfoque que el que tiene la mayoría de las personas.

Eliminar las deudas y comenzar desde ya son parte de las consideraciones de este autor.

Olvídate de las apariencias

Un punto más de encuentro entre quienes han buscado la receta de la riqueza económica está en alejarse de la presunción. Hay que generar ingresos y no despilfarrar a las primeras de cambio, pues la riqueza es un camino que se anda en el bienestar, más no en la apariencia.

No contraigas una deuda para aparentar un estatus que no tienes; vale la pena hacerlo si se trata de hacer crecer el dinero, a través de una inversión: si además de trabajar, has puesto tu dinero a trabajar para ti, ya diste un paso adelante.

La importancia de la disciplina

Precisamente dentro del campo de hacer a un lado las apariencias y concentrarte, está la disciplina.

Rafael Badziag, autor de The Billion Dollar Secret: 20 Principles of Billionaire Wealth and Success, destacó en su obra que, tras un lustro entrevistando a multimillonarios, que las personas a las que recurrió son ‘las personas más disciplinadas que he conocido. Se pusieron la vara muy alta a ellos mismos y a las personas que les rodean’.

Y esa disciplina va lo mismo a enfocarse en encontrar diversas fuentes de ingresos, que a hacer ejercicio, alimentarse sanamente, y mantenerse informados. Los millonarios en general se comprometen en sus metas y buscan las maneras de llegar hasta ellas.

Tucker Hughes, quien a sus 22 años se convirtió en millonario, dice que la inversión más segura que ha hecho ‘es en mi futuro’. Se refiere a prepararse, buscar mentores y estar siempre dispuesto a aprender.

Tiempo y riesgos

Stacy Johnson, fundador de Money Talks News, por su parte, destaca que el tiempo es un recurso no renovable, y que el dinero es tiempo. Indica que es necesario correr riesgos para hacer crecer el dinero; tiempo y riesgos son factores que debemos tomar en cuenta al invertir.

Warren Buffett es uno de los personajes más claros con su óptica de la importancia del tiempo en la creación de riqueza: llama a invertir considerando ‘un horizonte de varias décadas y huir de las ganancias rápidas’ y agrega que ‘no importa cuán grande sean talento y esfuerzo. Algunas cosas llevan tiempo’.

No hay rendimientos sin riesgo, pero la forma más eficaz de minimizar riesgos al invertir es diversificando.

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Lo más importante es dar el primer paso, para empezar en el camino y ser parte de los libres.